Ciudad de México.- La icónica atleta sinaloense, María del Rosario Espinoza, continúa siendo un faro de inspiración y motivación para las nuevas generaciones del taekwondo en México. En una emotiva sesión con sus alumnos en el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR), compartió las experiencias detrás de cada una de sus tres preseas olímpicas. Rememorando su primer oro en Beijing 2008, Espinoza destacó el valor sentimental que cada medalla representa en su carrera.

Antes de dirigir el entrenamiento diario de la selección nacional de para taekwondo, Espinoza compartió sus recuerdos sobre las competiciones olímpicas, destacando el impacto emocional de cada una. Desde la grandeza de Beijing 2008 hasta la superación personal de Londres 2012, María Espinoza reveló cómo cada experiencia en el podio olímpico moldeó su carácter y determinación.

Actualmente al frente de la selección de para taekwondo, María Espinoza, junto con la entrenadora nacional Jannet Alegría Peña, se prepara para llevar a cinco seleccionados a París 2024. La intensa preparación incluye su participación en el Campeonato Panamericano en Brasil, donde buscarán alcanzar nuevas hazañas en el tatami y seguir inspirando a futuras generaciones del taekwondo mexicano.